Calmas mi soledad con tus palabras.
Calmas mi soledad con tu poesía.
Calmas ese dolor sobrero.
Con quiebro mágico, indeleble entrega.
Con juego de regocijos
que alientan a este amador austero.
Llenas los días de rima y verso
con tu presencia de manos tiernas.
Llenas los días con tu prestancia
que algo me enmienda y nunca me daña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario